Archivo de marzo, 2008

Virgen de la Llama

Posted in Sin sitio on marzo 19, 2008 by siralsenbert

 

El paso salió reluciente. Cirios encendidos. El verbo mecer recobraba el sentido de nuevo, ahora, en Semana Santa. Bamboleo. No sólo se mecían las cunas de los niños llorones. Velas encendidas y cierta brisa primaveral. Sí, este escrito acaba como ya habéis imaginado. Ya, ya sé que acaba en vuestra imaginación. Cirios encendidos y brisa primaveral. Así como ardió Roma ardió la Virgen de la Llama en la Calle Cerón de aquella capital de provincia donde las mantillas habían dejado de rezar el rosario en procesión y llevaban siempre y ahora una mano en el coño para aparentar que hacían algo. Contar. No sé qué contaban, si los gritos de lamento o algo más procaz que me da vergüenza dejar por escrito.

Fontanería y afeitados

Posted in Sin sitio on marzo 5, 2008 by siralsenbert

 

Así como la fontanería es puro razonamiento deductivo, el parecido con otra persona es pura coincidencia.

La coincidencia siempre es un hecho casual, tan casual como la rotura de la tubería del lavabo del cuarto de baño donde diariamente te afeitas. Y el momento fortuito; ese hecho que se despendola al albur justo en el instante en que, recién salido de la ducha, te ibas a afeitar. Y acontece sobre ti. Ese estallido sobre tu cara, esa manera involuntaria, ese accidente sobre tu rostro, ese estrello estrella que se estrella y vuelve a estrellar contra ti; ese chorro de agua fría que te moja sin querer, esa cara que se queda gélida, ese ibas a afeitarte. Ese joder sonoro.

Estos momentos siempre son fortuitos. Los momentos son siempre fortuitos. Como los acontecimientos inesperados en los que necesitas un tiempo, o dos, o tres para asimilarlos. El tiempo, el tiempo que siempre está ahí y que va sobre una especie de fuga con alas. Fuga, en este caso, es un término que me da la gana personificar en algo femenino. Como no, siempre femenino.